En el mundo de los negocios, el análisis DAFO se utiliza para entender las debilidades y las amenazas que ponen en riesgo el desarrollo de la compañía y, al mismo tiempo, detectar las fortalezas y las oportunidades que la misma puede aprovechar para seguir creciendo.
Este concepto, del mismo modo que es útil para los negocios, puede ayudarnos a mejorar nuestra propia situación si adaptamos la herramienta y realizamos nuestro propio DAFO personal. Si conocemos nuestras fortalezas, podremos enfocar nuestros esfuerzos en aquellas cosas en las que realmente destacamos, y si somos conscientes de nuestras debilidades, podremos saber a la perfección qué debemos evitar, en qué debemos mejorar y en qué áreas necesitamos ayuda profesional.
Si unimos esas ideas, tus fortalezas y oportunidades te ayudarán a identificar aquellos aspectos que pueden potenciar tu carrera y tu vida a largo plazo. Tus debilidades, y las amenazas que tienes que afrontar, son precisamente los aspectos en los que tienes que trabajar para asegurarte de que tus objetivos sean alcanzables.
Para llevar a cabo un análisis DAFO personal debes preguntarte a ti mismo una serie de preguntas sobre tu situación actual y rellenar con tus respuestas los cuatro cuadrantes básicos de este tipo de análisis. A continuación vamos a explicar en mayor profundidad cada uno de estos cuadrantes.
Cómo hacer un análisis DAFO personal
Fortalezas
Aquí, el objetivo principal es descubrir qué te diferencia del resto de personas. La idea es detectar aquellas cualidades que te hacen destacar. Recuerda que estamos desarrollando un plan de desarrollo personal, por lo tanto no te centres únicamente en tus cualidades profesionales. Por el contrario, analiza todas tus experiencias y todas aquellas oportunidades que consideres que pueden ayudarte a crecer y a desarrollarte como persona. Esto incluye tu educación, factores personales, así como tus campos de interés. Intenta contestar a las siguientes preguntas:
- ¿En qué eres realmente bueno?
- ¿Qué cualidades positivas ven las otras personas en ti?
- ¿Qué sabes hacer mejor que las otras personas?
- ¿De qué está especialmente orgulloso de ti mismo?
Para dar respuesta a estas preguntas puedes hablar con tus amigos y personas que te conocen. Y es que por lo general, todos tendemos a infravalorarnos de una u otra manera, lo que hace que no le demos importancia habilidades y aspectos de nuestra vida que sí son destacadas por otras personas. Que otras personas te digan en qué destacas puede ayudarte de manera más que notable a potenciar tu propia experiencia.
Debilidades
En este apartado se trata de identificar aquellas cosas en las que no eres tan bueno y en las que, por tanto, puedes mejorar. Cuando anotas tus debilidades das el primer paso para reducirlas, gestionarlas y hacer que no te impidan conseguir tus objetivos. Eso sí, no seas demasiado autocrítico, ya que todos tenemos debilidades. La única finalidad es reconocerlas y aprender a gestionarlas.
Intenta responder a estas preguntas para completar el cuadrante acerca de las debilidades en tu análisis DAFO personal:
- ¿Qué habilidades luchas por dominar?
- ¿Qué haces únicamente porque tienes que hacerlo para satisfacer los obligaciones de tu trabajo?
- ¿Hay aspectos de tu personalidad que te impiden avanzar?
- ¿Qué aspectos suelen identificar las otras personas como una debilidad tuya?
- ¿Dónde eres vulnerable?
- ¿Dónde careces de experiencia, recursos o conexiones?
Oportunidades
Ahora que has reflexionado sobre tus fortalezas y tus debilidades debes enfocarte en comprender las oportunidades que tienes ante ti. Pregúntate lo siguiente:
- ¿De qué manera puedes sacar provecho de tus fortalezas?
- ¿Qué oportunidades se les presentan a las personas que hacen estas cosas bien?
- De las cosas en las que eres bueno, ¿qué te encantaría hacer?
- ¿Cómo puede minimizar tus debilidades?
- ¿Dónde ves una mayor capacidad de crecimiento en ti mismo: en tu actual compañía, en una empresa diferente, en otro sector o comenzando una carrera completamente nueva?
- ¿Qué tendencias tienen un impacto en tu carrera actual o en la que estás pensando seguir?
Amenazas
Por último, piensa en aquellas cosas que realmente pueden poner en peligro tu éxito. Aunque las amenazas a menudo no pueden ser controladas de manera directa, sí que podemos establecer un plan. Por eso es tan importante identifiques todas las que te sean posible. Cuanto más sepas sobre ellas, menos probabilidad existirá de que ocurra algo inesperado.
Es posible que sientas que pensar acerca de tus amenazas te causa inestabilidad y estrés. Sin embargo, te generará muchos más problemas a largo plazo no considerarlas, sobre todo cuando comiencen a convertirse en algo mucho más significativo.
Recuerda, una amenaza pierde mucha capacidad de impacto si es gestionada y nos hemos preparado para afrontarla. Hazte a ti mismo las siguientes preguntas para descubrir tus amenazas potenciales:
- ¿Hay alguna amenaza general en la que debas pensar?
- Si no abordas tus debilidades, ¿qué problemas podrían causarte?
- ¿Qué contratiempos podrías enfrentar?
- ¿Qué obstáculos han superado otras personas cuando intentan llegar a donde quieres ir?